Auguste Marie Louis Nicolas Lumière (1862-1954) y Louis Jean Lumière (1864-1948) fueron dos cineastas franceses que trabajaron en el taller de su padre. Louis hizo, de hecho, mejoras en el proceso de creación de fotografías trabajando ahí. A partir de 1892 comenzaron a fantasear y a patentar ideas para la grabación de imágenes en movimiento.
De vuelta de un viaje de París consiguen un quinetoscopio, a través del que, tras examinarlo, consiguieron desarrollar un aparato que grabaría y proyectaría, e cinematógrafo, que se basaba en el principio de persistencia retiniana para la consecución de la creación de imágenes en movimiento.