Es la aberración óptica que se produce cuando una lente es incapaz de formar una imagen en un plano focal, y en su lugar distorsiona esta imagen haciendo que las líneas rectas aparezcan representadas como curvas.
Este tipo de aberración se produce sobre todo en objetivos de distancia focal corta (los conocidos como ojos de pez), y es virtualmente inevitable. No obstante, objetivos profesionales palian este problema de manera aceptable, mientras que en otros más baratos, como los de las cámaras gran angular de los móviles el efecto es claramente visible.
Puede tomar dos formas: de barrilete o de acerico, cuya principal diferencia es la orientación de la curvatura.
Ejemplos prácticos de aberración curvilínea
Fuente: Apuntes sobre Lentes y sistemas ópticos (Fernando Rivera Córdoba)
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